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ANA FERNÁNDEZ Y PEDRO VALDECANTOS

Ambos nacemos en Madrid en 1959, a la vez que Rich y Jay fundaban la corporación Amway en Michigan.  Ana es licenciada en derecho por la universidad complutense siguiendo los pasos familiares.  A los padres de Pedro los destinan a Cádiz, dónde llegan en 1964.

En 1981 ambos aprobamos la misma oposición del recién creado Instituto Nacional de Empleo, y en enero de 1982 destinan a Ana a Cádiz, por la acumulación de trabajo, durante un mes... desde el día siguiente en que nos presentan, vivimos juntos y al año nos casamos.  Creamos una empresa de fotografía (Galería fotográfica CLICK) a los 22 años con seis créditos ya que ningún banco nos daba los suficiente, en la época los intereses estaban por encima del 10 % y, a los tres años, tuvimos que cerrar el estudio por motivos obvios.  Estuvimos tres años más pagando las deudas.

En 1987, Pedro deja el INEM para trabajar a tiempo completo en CC.OO. dónde llega a dedicarle más de 12 horas diarias.  Mientras, Ana aprueba otra oposición ya como técnico superior del Ministerio de Trabajo.  Es un sueldo más decente que el de Pedro en el sindicato, pero entre ambos salarios entramos en la celebérrima "clase media", coche a plazos, vacaciones por España en verano, una buena casa (de alquiler), cenas fuera (en chinos), etc.

En febrero de 1989, nuestra querida vecina y amiga Marga, nos invita a oír una idea de negocios en la que "haciendo lo que ya hacemos, en poco tiempo ganamos millones de pesetas".  curiosamente, el mismo día, en el buzón de casa teníamos un casette de un sudamericano contactándonos al mismo negocio.  Esa noche, a Ana, Marga le explica algo parecido al plan de marketing de Amway.  Cuando llego por la noche, me encuentro una nota de Ana diciéndome que suba a casa de la vecina.  Y me lo explica a mí mientras Ana jugaba con las hijas de Marga.

Obviamente no era un negocio para nosotros, y pensamos que tampoco para Marga.  Era algo muy extraño y fuera de nuestra cultura y filosofía.  Desde el sindicato, investigué a Amway.  En pocos días, me llegaron informes muy positivos sobre la empresa como tal.  Incluso un informe de DB International que recomendaba hacer negocios con Amway.

Lo mejor que hizo Marga fue pedirnos el día 8 de marzo de 1989 que subiéramos a tomar unas cervezas a su casa.  Ahí estaban Pilar y Miguel Aguado, muchas sillas, una pizarra, un par de personas (que ni me acuerdo quienes eran), Marga y las cervezas, tortillas, etc.  Miguel explicó, correctamente, el plan de ventas y marketing de Amway y lo entendimos... había que poner esfuerzo.  Miguel, en el cierre, nos dijo que, aunque no nos gustara el multinivel ni Amway ¿por qué lo desarrollaríamos?.  El sueño.  Y el nuestro era estar juntos más tiempo.

En diciembre de 1989, calificamos plata (facturación del grupo por encima de 15.000 €), en febrero del 90, rubí (por encima de 30.000 €), en agosto de ese año calificamos Esmeralda (tres grupos platinos) y en marzo de 1992, Diamantes (seis grupos platinos).

Yo me planteé, en marzo de 1989, dejar el sindicato en cinco años (con 34 años), y a finales de 1989 ya ganábamos más que en CC.OO con lo que lo dejé ese mismo año.

Cuando comenzamos Amway, no teníamos ni pasaporte, conocíamos bastante bien España, pero no habíamos salido, ni siquiera, a Portugal.  Hoy hemos viajado a más de 35 países, tenemos amigos en muchos de ellos, y hemos hecho cosas que no soñamos que podríamos hacer.

Os invitamos cordialmente a darle "duro", dos horas diarias durante un año, sin excusas, con actitud y fuerza, al plan de marketing de Amway.  Hay muy poco que perder y ¡cuánto por ganar!, salud, dinero, aventuras, amigos, recompensa, sensación de libertad... Sin duda es la mejor opción de negocios en la actualidad.